Tipos de actividades en Terapia Asistida con Animales
Las actividades que utilizamos en Terapia Asistida con Animales son parte fundamental de la intervención, tanto su diseño como su desempeño debe ser realizado por profesionales de la salud, social o el ámbito psicológico.
En ocasiones, tenemos dificultades para preparar o diseñar nuevas actividades, tener claro los tipos que utilizamos nos puede ayudar a diseñarlas y a elegir cuáles son las mejores para alcanzar los objetivos del tratamiento.
En este artículo del blog, explicaremos parte de los tipos de actividades de Terapia Asistida con Animales que utilizamos en IncrescenTO. Vamos a detallar los principales, aunque existen diferentes clasificaciones.
¿Qué tipos de actividades vamos a ver?
- Según el momento del proceso de intervención.
- Según el momento de la sesión.
- Según la modalidad de la actividad.
- Según su función.
Todo esto acompañado de ejemplos y explicaciones detalladas.
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Tipos de actividades de terapia Asistida con Animales
SEGÚN EL MOMENTO DEL PROCESO DE INTERVENCIÓN:
Es el primer paso y la primera clasificación que tenemos que tener en cuenta para diseñar o utilizar las actividades en Terapia Asistida con Animales. Según el momento que estemos del proceso se utilizarán unas u otras.
Las fases de una intervención desde Terapia Asistida con Animales son:
Fase de construcción de la relación -> Fase de potenciación o de mantenimiento -> Fase de separación o finalización.
(Si queréis que las expliquemos dejádnoslo en los comentarios).
Estos son los tipos de actividades de esta clasificación:
Actividades de conexión:
En la fase de construcción, no podemos utilizar actividades muy complejas, tanto a nivel de dificultad como secuenciación.
Nos encontramos en una fase en la que hay que construir la relación terapéutica y del perro con el participante por lo que se utilizarán actividades que ayuden a establecerla.
También es la fase en la que se llevan a cabo ejercicios más sencillos, aprendiendo a interactuar con el perro e ir aumentando la dificultad según este aprendizaje mejore y la terapia así lo precise.
Algunas de estas actividades pueden ser: Aprender el nombre del animal, la raza, la edad… aprender a cuidarlo, cepillarlo, limpiarlo… Juegos básicos o habilidades sencillas, circuitos agility fáciles…
Actividades centrales:
Son las actividades en los que se centran la obtención de los objetivos que se lleva a cabo en la fase de potenciación.
Nos encontramos en una fase en la que la relación con el paciente está establecida, en la que se tienen que empezar a ver resultados notables y conseguir objetivos, por lo que las actividades deben ser ya más complicadas, exigentes y desarrolladas de manera meticulosa para que haya efectos satisfactorios.
Algunos ejemplos pueden ser: circuitos de agility complejos, ejercicios y juegos con secuencias largas, utilizar más de un perro en actividades como dar de comer o jugar a la pelota, entre muchas otras.
Actividades de separación:
Son actividades que se realizan para facilitar el proceso de separación cuando el usuario va a recibir el alta o va a abandonar el servicio. En muchos casos, o en la mayoría por no decir todos, se establece una relación muy fuerte entre el animal y la persona y es por ello que debemos preparar al participante para esta separación.
Ejemplos: Lo mejor en estos casos es realizar actividades que sean una serie consecutivo o un entrenamiento o juego que deba llevarse a cabo en varias sesiones para proporcionar un principio y un final y uno de éstos el definitivo.
SEGÚN EL MOMENTO DE LA SESIÓN:
Para organizar las sesiones de Terapia Asistida con Animales y decidir qué actividades utilizar para cada parte y facilitar y mejorar el desarrollo de la misma, se dividen las actividades de la siguiente manera:
Actividades iniciales o de contacto:
Son las actividades con las que se inicia la sesión para establecer una rutina y una toma de contacto con el animal y los profesionales. El saludo está incluido entre estas actividades tanto a nivel individual como grupal.
Algunas de las actividades utilizadas en esta parte de la sesión son las de cepillado o limpieza del animal como preparación del mismo de la sesión y así se establece la rutina.
Actividades troncales:
Son las actividades más importantes de la sesión y de la intervención, son con las que buscaremos alcanzar los objetivos y beneficios planteados en la fase de evaluación.
Forman parte importante de las actividades centrales y son en las que el terapeuta debe tomar las decisiones para trabajar al máximo todos los componentes de la persona y el grupo para mejorar su salud.
Estas actividades deben ser todas actividades principales (se explicarán más adelante).
Actividades finales:
Son las actividades que se llevan a cabo para finalizar la sesión. Se utilizan para ofrecer un apoyo a todo lo trabajado durante el tiempo de intervención a través de otras actividades de “repaso” más light.
Algunas de estas actividades están relacionadas con las actividades troncales siendo variaciones de ellas pero más sencillas. También se puede dejar un tiempo libre para que elijan el juego o que quieren hacer.
Actividades de vuelta a la calma:
Como su propio nombre indican son las últimas actividades que se hacen en la sesión para volverá a un estado de calma y de relajación, tanto a nivel individual como en grupo.
Algunas de estas actividades pueden ser dar un masaje al animal, acostarnos abrazados a ellos o sobre alguna parte de su cuerpo sobre todo el vientre, volver a equipar o a vestir al animal, cepillar, entre otras.
SEGÚN LA MODALIDAD DE LA ACTIVIDAD:
En este marco existen muchos tipos, sobretodo dependiendo de la disciplina en la que nos basemos para hacer la terapia. Vamos a exponer algunos de los más utilizados:
Actividades básicas de la Vida Diaria:
Es una de las áreas de ocupación, son las orientadas al cuidado del propio cuerpo. Comer, ducharnos, vestirnos, dormir, higiene, actividad sexual, cuidado de la vejiga…
Son utilizadas por terapeutas ocupacionales. Las actividades de cuidar al perro son instrumentales.
Actividades de lúdicas y de ocio:
Son las actividades que hacen en el tiempo libre y que te tienen un mero fin recreativo, es decir para divertirnos. Muchas de las actividades que hagamos en Terapia Asistida con Animales estarán dentro de este marco pero pueden ir en conjunto con otro tipo con el que busquemos obtener los objetivos terapéuticos.
Por ejemplo, podemos jugar a la pelota con un niño, que es una actividad lúdica, pero utilizamos al perro y la pelota como elementos perceptivos-cognitivos para mejorar la atención, las pautas de juego, el tiempo de concentración en el juego, seguimiento visual, etc etc etc.
Actividades sociales:
Son actividades grupales que se llevan a cabo con un fin de aprendizaje de habilidades sociales, de comunicación, respeto, pautas de espera, un aprendizaje social en general.
En muchos casos se precisa que muchas actividades se realicen de manera individual como actividades de conexión en la fase de construcción para luego realizarlas con un mejor desempeño en el grupo para poder trabajar los objetivos.
Actividades instrumentales de la Vida Diaria:
Son actividades más complejas que requieren de mayor autonomía personal y que se encargan del cuidado de otros, del hogar, de materiales y también la capacidad de utilizar objetos como el teléfono o también la capacidad para tomar decisiones.
El cuidado del animal y muchas de las actividades que se realizan con él se encuentran dentro de este grupo.
Actividades cognitivas:
Son actividades que se utilizan para estimular las capacidades cognitivas y funciones ejecutivas como la memoria, la planificación la concentración, el razonamiento o la planificación.
Como podemos ver muchas de estas actividades irán relacionadas con otras, posiblemente no serán meramente cognitivas sino también de la vida diaria o lúdicas, por ejemplo.
Actividades perceptivas:
Son actividades que se llevan a cabo para trabajar los aspectos perceptivo-motrices que nos ayudan a percibir el mundo, actividades para percibir el movimiento y captar atención, leer y escribir, reconocer caras y objetos, recordar lo que vemos para facilitar el aprendizaje…
Podemos utilizar al animal y su movimiento, así como sus características, para trabajar muchos aspectos perceptivos del paciente.
Actividades sensoriales:
Son las actividades destinadas a trabajar las sensaciones y los sentidos del usuario. Es obvio que a través de los animales podemos trabajar muchos de estos puntos, facilitando el desarrollo cerebral y la recuperación de muchas funciones.
Además de la propia información sensorial que nos proporciona el propio animal de terapia, se pueden utilizar también materiales de cuidado u otros que se utilicen con el animal como cepillos, colonias, toallitas…
Actividades físicomotoras:
Actividades dirigidas a estimular a nivel físico al participante. Estos ejercicios suelen ser muy activos pero también incluyen todas esas que generen movimiento en solo una parte del cuerpo.
Estas actividades también van en conjunto con otras, con más o menos protagonismo en función de los objetivos y necesidades.
SEGÚN SU FUNCIÓN:
Hemos llegado a la última clasificación de este artículo y no por ello menos importante, es más, quizás sea la más importante para saber que estamos realizando una buena intervención desde Terapia Asistida con animales.
Esta clasificación se encarga de organizar las actividades según la función con la que las utilicemos, es decir, si las utilizamos para evaluar, para generar beneficios y conseguir objetivos o auxiliares para ofrecer un apoyo a la intervención.
También esta clasificación se planifica según la importancia que le demos al animal.
Actividades de evaluación:
Como su palabra indica, son aquellas que se utilizan antes de la intervención para conocer las características y necesidades del participante o del grupo para poder establecer los objetivos a conseguir con la terapia.
Esta fase de evaluación se tiene que realizar en dos partes, una sin la presencia del animal y otra con la presencia del mismo con actividades específicas para valorar la relación con el usuario y todos sus componentes a través del animal.
Actividades principales o esenciales:
Son las actividades que se llevan a cabo directamente interactuando con el animal, en la que es un elemento insustituible, en la que sin él la actividad no tendría ningún sentido.
Estas actividades son las relacionadas con las troncales y las centrales debido a que es a través de la interacción directa del animal donde vamos a conseguir resultados más satisfactorios y de las cuales nos distinguimos y defendemos como profesión.
Al menos el 80% de cada intervención o sesión deben ser de este tipo de actividades.
Actividades auxiliares intrínsecas o secundarias:
Son actividades secundarias o de apoyo que se llevan a cabo en estas intervenciones con el fin de ofrecer un apoyo a las actividades principales. En estas actividades el animal no tiene por qué ser el elemento principal.
Ejemplo: Limpiar el material, hacer un dibujo, preparar los juegos, construir o crear un elemento para un animal, rellenar una ficha con la información del animal, utilizar juegos en los que el perro no es el elemento principal…
Su uso es importante para hacer una intervención completa y de calidad.
Si la sesión o intervención está formada mayoritariamente por estas actividades no podemos considerarla Terapia Asistida con Animales ya que el animal es fácilmente sustituible y no se trabajan a través de él los objetivos terapéuticos ni se obtiene gracias al animal los beneficios y resultados sino a estas actividades de apoyo que ya estaría integradas dentro de una intervención de otra disciplina.
Por qué utilizar actividades principales o esenciales
Vamos a poner un ejemplo sencillo y rápido para estos dos últimos tipos de actividades de Terapia Asistida con Animales:
Jugar con la pelota con el perro es una actividad principal o esencial ya que aunque se utilice la pelota, el perro es el elemento central y con el que se trabajan los objetivos.
Dibujar a un perro o rellenar una ficha es una actividad auxiliar ya que el perro no es el elemento central sino la ficha o el dibujo que es a través de lo que se trabaja en la que el animal podría ni estar.
Entonces, ¿Por qué la mayor parte de la intervención deben ser de actividades principales?
Porque si denominamos una disciplina terapia con… querrá decir que ese va a ser el elemento principal e insustituible con el que se trabajarán todos los aspectos, no solo a nivel lúdico o motivador.
Además, déjame que te ponga un ejemplo para que se entienda mejor:
Si te dicen que vas a hacer una terapia con ordenadores, tu esperas trabajar con el ordenador, con sus aplicaciones u otros aspectos del propio ordenador, ¿¿verdad??
Y si te digo que en vez de eso, vamos a hacer otros juegos y actividades mientras el ordenador está ahí motivándonos a realizarlas porque después vamos a jugar con él. No tiene mucho sentido, porque tu esperas trabajar con el ordenador, ¿¿cierto??
Pues al igual que con la Terapia Asistida con Animales.
Si te digo que vamos a hacer una Terapia Asistida con Perros y, en vez de trabajar con el propio perro, está en una mesa mientras hacemos fichas o colocamos números o en el suelo mientras secuenciamos pictogramas u otros encima de él, pues no es que estemos utilizando al perro para hacer la terapia sino las otras actividades, por lo que no tiene mucho sentido llamarlo Terapia Asistida con Perros, a que no?
Tampoco nos defiende como profesión que esto sea así, porque que otros profesionales nos vean haciendo esto se darán cuenta de que el animal es prescindible.
Profesionales a desempeñar actividades Terapia Asistida con Animales
Y para finalizar, os dejamos con una justificación de porque deben ser los profesionales de la salud, sociales o del ámbito psicológico, los que lleven a cabo la terapia desde el comienzo hasta el final, incluyendo el diseño y desarrollo de las actividades:
- Son los profesionales cualificados para llevar a cabo intervenciones terapéuticas dentro de su ámbito.
- Están capacitados para evaluar a personas con diversidad funcional o necesidades especiales.
- Se presentan como el personal preparado para tomar decisiones dentro de la intervención y en la propia sesión, por lo que aunque sea otra persona la que te diseñe la actividad, en la mayoría de los casos hay que realizar adaptaciones o aumentar o disminuir dificultad según las necesidades y esto lo tiene que hacer un profesional capacitado.
- Las profesiones de la salud, del ámbito social y psicológico está reconocidas a nivel de ley y con formaciones oficiales, en cambio no hay ninguna titulación oficial ni legislación de Terapia Asistida con Animales.
- Todo el proceso será mejor si es llevado a cabo por la misma persona o equipo. Si la evaluación es realizada por un profesional de la salud y la intervención por una persona que no lo es, dificulta en gran medida que los resultados sean buenos.
Esperamos que os haya gustado y contribuido a vuestro conocimiento. Podéis dejar cualquier pregunta o información que consideréis apropiado para el bien de todos.
Un saludo desde IncrescenTO!
Info.increscento@gmail.com